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DÍA 8: MEDIA LUNA EN SUPINO.

 

ॐ Día 8: APERTURA COSTAL.

 

Cuando lateralizamos nuestra columna vertebral, ayudamos la flexibilidad la misma, mejorando su alineación.

 

Al trabajar los espacios intercostales, abriéndolos, la caja torácica se flexibiliza también, lo que nos ayuda a tener una mejor experiencia respiratoria. A poner más conciencia en cómo respira cada uno de nuestros dos lados (derecho e izquierdo).

 

Si prestamos atención a cómo se sucede la respiración en cada uno de estos lados, tal vez, podamos sentir si en uno de ellos la apertura se da con más facilidad que en el otro.

 

Cuando un lado está más limitado o cerrado que el otro, es habitual que el lado “bueno” intente suplir la parte del trabajo que no puede realizar el lado con más fijaciones. Si notamos esto, podemos poner el énfasis en trabajar el lado más “cerrado”, para liberar las posibles adherencias que pudiera haber y tomar más conciencia de nuestro modo de respirar.

 

Buen día y feliz práctica.

 

Om Shanti

 

 

ॐ Día 8: Práctica

 

APERTURA COSTAL.

 

Nos colocamos en supino con las rodillas flexionadas y las plantas de los pies en apoyo, separadas al ancho de caderas. Colocamos nuestra pelvis de modo que la curvatura lumbar no este acentuada, que no haya tensión en la zona. Llevamos el mentón hacia la garganta, para que nuestra curvatura cervical tampoco esté acentuada.

 

1- Lentamente y con ayuda de los brazos vamos desplazando la espalda poco a poco por la esterilla hacia la izquierda, hasta conseguir lateralizar el tronco. La pelvis queda en el mismo sitio, no se desplaza. Las rodillas siguen apuntando hacia el techo.

 

Cuando lleguemos a una posición cómoda, en la que sintamos la apertura de nuestra caja torácica en el lado derecho (en el lado de la convexidad, el lado estirado), pero sin que el estiramiento llegue a ser molesto; nos mantenemos aquí una o dos respiraciones.

 

2- Estiramos ahora el brazo derecho hacia arriba pegándolo a la cara (si llegamos), si no llegamos con el brazo estirado, hasta quedar pegado a la cara, lo dejaremos flexionado o lo dejaremos alejado de la cara, donde no nos moleste.

 

Estiramos también la pierna del lado estirado en el suelo (derecha).

 

Respiramos en la postura, prestamos atención a cómo se sucede la respiración en nuestro lado más abierto.

 

3- Si queremos podemos estirar también la otra pierna en el suelo.

 

Para deshacer, flexionamos primero una rodilla, después la otra, apoyando las plantas de los pies en el suelo y recogemos el brazo al lado del cuerpo. Volvemos con el tronco al centro, desplazándonos despacio por la esterilla con la ayuda de los brazos.

 

Estiramos las piernas y nos dejamos sentir, acogemos las sensaciones que ha producido el ejercicio en nosotros. Notamos las diferencias con el lado aun no estirado.

 

Cuando estemos preparados, repetimos el ejercicio con el otro lado.

 

Buen día y feliz práctica.

 

Sat Nam