ॐ Día 21: VINYASA I. ADHO MUKHA SVANASANA – VIRABHADRASANA I.
Un Vinyasa es una especie de composición o sincronización en la que encadenamos una serie de asana (posturas) con la respiración. El hilo conductor para unir las asana es la respiración, es lo que nos hace fluir de un movimiento a otro.
Es importante que realicemos el paso de una postura a otra con consciencia, poniendo la atención en cada uno de los movimientos que vamos realizando y sintiéndonos en cada una de las asana que realizamos.
A mí personalmente, los vinyasa me sirven para conectar conmigo misma y con el momento presente, ya que al ser como una coreografía y tener que estar pendiente de la respiración y del movimiento, me ayuda a estar en el aquí y en el ahora.
Buen día y feliz práctica.
ॐ Om Shanti ॐ
ॐ Día 21: Práctica
VINYASA I. ADHO MUKHA SVANASANA – VIRABHADRASANA I.
Comenzamos en cuadrupedia.
Vamos a Adho Mukha Svanasana, para ello apoyamos dedos de los pies y elevamos la pelvis hacia arriba, dirigiendo los isquiones hacia el techo. Nos estabilizamos en el asana y respiramos al menos 3 veces haciendo todos los pequeños ajustes que necesitemos para sentir la comodidad en la asana.
Llevamos ahora ligeramente el peso del cuerpo hacia los brazos, para poder apoyar la planta del pie izquierdo por completo en el suelo, orientada unos 30º aproximadamente hacia afuera. Llevamos el pie derecho adelante, entre las manos y apoyamos la planta del pie por completo, con los dedos mirando hacia delante. Dejamos la rodilla derecha doblada en ángulo recto, con la rodilla sobre el tobillo, que NUNCA sobrepase los dedos del pie, para proteger la articulación de la rodilla.
Nos enraizamos bien, sentimos como nuestros pies están bien anclados al suelo.
Desde aquí, pasamos a Virabhadrasana I, vamos elevando los brazos por delante del cuerpo, paralelos entre sí, las palmas de las manos enfrentadas, hasta llegar a estirarlos perpendiculares al suelo. Si podemos y queremos juntamos las palmas de las manos en Anjali mudra. O sino las dejamos como estaban, tirando de los brazos hacia arriba, sintiendo cómo crecemos, como conectamos cielo (manos) y tierra (pies). La mirada va al frente o un poco elevada si queremos.
Mantente unas respiraciones en Virabhadrasana I, siente la fuerza de esta asana en ti.
Desde Virabhadrasana I, separamos las palmas de las manos (si las hemos juntado) y flexionamos el tronco desde las caderas, con los brazos por delante, estirados y la cabeza entre ellos. Apoyamos las palmas de las manos a cada lado del pie derecho, rotamos el pie izquierdo de modo que los dedos del pie miren hacia delante y sacamos la pierna derecha apoyando los dedos del pie atrás para llegar de nuevo a Adho Mukha Svanasana.
Si necesitamos descansar bajamos a cuadrupedia y descansamos en Balasana, el feto.
Cuando nos sintamos preparados realizamos el vinyasa al otro lado.
Repetimos al menos 2 veces con cada lado.
Si sentimos que hemos integrado los movimientos en nosotros, podemos pasar a hacer las asana de forma más dinámica, es decir, cada asana se corresponderá con una fase de la respiración:
Cuadrupedia – Espirando vamos a Adho Mukha Svanasana – Inspirando subimos a Virabhadrasana I lado derecho – Espirando Adho Mukha Svanasana de nuevo – Inspirando Virabhadrasana I lado izquierdo.
Y así seguimos repitiendo los ciclos que nos apetezca.
Buen día y feliz práctica.
ॐ Sat Nam ॐ